Wednesday, September 12, 2007

 

Los estudiantes de lingüística se pronuncian sobre la actitud de Martha Hildebrandt

Dando el ejemplo, un grupo de estudiantes de Lingüística de la Pontificia Universidad Católica del Perú ha redactado, hace ya varios días, un pronunciamiento un pronunciamiento de rechazo a las declaraciones de Martha Hildebrandt sobre las lenguas minoritarias en el Perú. Se han unido ya muchas personas, incluidos varios profesores de la PUCP.

Pueden leerlo aquí (y todavía están a tiempo de unirse).

Labels: ,


Friday, September 07, 2007

 

Congresista Hildebrandt, congresista Hilaria

Los lingüistas vivimos en una permanente encrucijada. Por un lado, nuestra meta es saber cómo funciona realmente el lenguaje. Para conseguir eso, no nos queda otro camino que sentarnos a observar cómo usan los hablantes sus respectivas lenguas y variedades: nadie sabe más del lenguaje que los propios hablantes, aunque ese conocimiento sea inconsciente y esté oculto (precisamente nuestro trabajo es desenterrarlo de entre los enunciados y las intuiciones lingüísticas). Pero, por otra parte, siempre nos encontramos, en todas partes y en todas las lenguas, con el fascinante hecho de que los usuarios imaginan que sus formas de hablar son superiores o inferiores a las de los otros. Y no solo eso, sino que nos preguntan, con avidez, con inusitada esperanza y fe ciega, cuál es la forma superior, cuál es el giro correcto, cuál la palabra autorizada. Ante tamaño acto de confianza, la tentación de jugar a ser Dios, de erigirse en árbitro supremo del bien y del mal, es tan grande que a ella han sucumbido no pocos colegas.

Un ejemplo reciente de esa confusión entre el papel del lingüista y el de brujo de la tribu nos lo da la congresista Martha Hildebrandt, quien dijo lo siguiente en pleno debate en el Congreso de la República:

yo no soy quechuahablante pero soy lingüista, aquí se respetan las especialidades. Cuando se habla de medicina los médicos tienen más estatus, cuando se habla de derecho, por supuesto los abogados, y yo los respeto y mando a preguntar a los abogados o a los médicos cuando se trata de un tema médico o abogado, pero que tenga la representatividad lingüística de una lengua los hablantes, es como decir que los enfermos saben más de medicina, y los presos y condenados saben más de derecho.
Martha Hildebrandt, Diario de Debates del Congreso, 6 de septiembre del 2007, p. 34
Dos aspectos son notables en este texto. El primero debería saltar a la vista: para Martha Hildebrandt los hablantes no pueden representar a sus lenguas, solo los lingüistas pueden hacer eso. Es decir, según la congresista, los hablantes no tienen nada que decir acerca de sus lenguas (o de sus derechos lingüísticos). Como los presos y los pacientes con respecto al Derecho y la Medicina. Pero Hildebrandt aplica mal la comparación. Los lingüistas no somos la autoridad final en la lengua; somos la autoridad final en Lingüística—eso nos lo ha recordado varias veces el propio Director de la Real Academia Española. A los médicos no se les discute cuando hablan de Medicina, ¿pero no tienen acaso ninguna voz los pacientes cuando se discute cuáles son sus derechos o la forma en que deberían ser tratados? Los médicos curan a los pacientes, no los representan. Los lingüistas estudiamos las lenguas, pero no podemos arrogarnos la representación de los hablantes—el dislate de Hildebrandt no es original: es fama que Unamuno se enemistó con toda la intelectualidad vasca cuando se negaron a nombrarlo primer Director de la Real Academia de la Lengua Vasca (pequeño problema: Unamuno no hablaba vasco).

El segundo aspecto es incluso más interesante. En la expresión que tenga la representatividad lingüística de una lengua los hablantes, el verbo tenga aparece en singular pero el sujeto los hablantes es plural. Lo que pasa es que entre el verbo y el sujeto hay un largo objeto: la representatividad lingüística de una lengua, que parece concordar con el verbo (contra la costumbre normativa en español). Es un fenómeno característico del lenguaje oral (en particular con verbos como tener, ser o estar). Martha Hildebrandt, a pesar de su proclamado apego a la “corrección” gramatical, no puede controlar su propio conocimiento inconsciente. Hildebrandt-hablante se impone y Hildebrandt-correctora se diluye. Como siempre.

Pero eso no es todo.

El Diario de Debates del Congreso nos depara esta exquisita muestra de interacción entre las fuerzas del lenguaje y las prácticas sociales. En algún momento, se arma un intercambio de palabras en el hemiciclo. No es para menos. Martha Hildebrandt se ha despachado contra los derechos de las lenguas minoritarias:

la Constitución es demagógica en ese artículo. Yo como lingüista, dedicada 50 años, 20 de ellos a lenguas indígenas, puedo decir que ese es el artículo peor hecho de toda la Constitución. No pueden ser oficiales 40; 50 ni 60 lenguas.
Martha Hildebrandt, Diario de Debates del Congreso, 6 de septiembre del 2007, p. 32

Pero desde el punto de vista social, más vale la lengua que tiene muchos millones de hablantes, socialmente hablando, que la lengua que se está extinguiendo.
Martha Hildebrandt, Diario de Debates del Congreso, 6 de septiembre del 2007, p. 41
Las congresistas Hilaria Supa y Martha Hildebrandt se enfrascan en un debate que interrumpe las buenas maneras y vuelve incivil el diálogo. La Presidenta de turno, Martha Moyano, llama al orden:

Vamos a procesar la cuestión previa, vamos a procesar la cuestión previa. Congresista Hildebrandt, congresista Hilaria, vamos a procesar la cuestión previa. Por favor, congresista Hildebrandt y congresista Hilaria, les pedimos respeto al Pleno. Ya han hecho uso de la palabra y cada una ha sentado su posición…
Martha Moyano, Diario de Debates del Congreso, 6 de septiembre del 2007, p. 42
Fíjense en este extraordinario vocativo: congresista Hildebrandt, congresista Hilaria. Martha Hildebrandt es la congresista Hildebrandt. Hilaria Supa es la congresista Hilaria. A una el apellido, a otra el nombre de pila. Demás está decir que la norma culta manda que en esta ocasión se use el apellido y no el nombre de pila---pero ya habíamos notado antes lo fácil que resulta quebrar esa norma cuando el interlocutor es quechuahablante. No es la primera vez que ocurre durante el debate. Hay otras dos ocasiones en que se usa la misma fórmula:
Congresista Hilaria, puede hacer uso de la interrupción. (p. 39)
Muchas gracias, congresista Hilaria. (p.40)


Hildebrandt-correctora, defensora de la norma culta, que se rasga las vestiduras por la menor desviación, que salta como fiera ante cada infracción, no dice ni pío esta vez. Tal vez no se da ni cuenta. Porque esta vez no le importa, porque no le interesa realmente si la gente habla bien o mal, si el lenguaje se usa en forma apropiada o no. Así como al vendedor de medicinas bambeadas le importan un bledo las vidas de los enfermos, y lo único que quiere es conseguir un dinero fácil, a Hildebrandt en verdad le importan un bledo las vidas de los hablantes, sus ilusiones, sus esperanzas y sus lenguas. Lo único que quiere es que le rindan pleitesía.

El maestro Eugenio Coseriu, que fuera mi profesor en la Universidad Católica, solía decir que los lingüistas tenemos también el deber de atender a las preocupaciones del hablante, de servirlo en sus necesidades expresivas, de orientar la visión que tiene de su propia lengua. Somos los lingüistas los que estamos al servicio de los hablantes, somos nosotros los que aprendemos de ellos las maravillas del funcionamiento del lenguaje, y en modesta compensación por tamaño regalo, no podemos sino estar de su lado cuando son agredidos, ridiculizados o discriminados por hablar como hablan, por mostrarnos las posibilidades y los límites de la facultad lingüística. Hildebrandt traiciona lo más sagrado de nuestra profesión, aquello que es nuestra razón de existir, el objeto y la inspiración de nuestro trabajo: los hablantes y sus lenguas.

Labels: , , ,


Monday, September 03, 2007

 

Los castellanos del Perú

Una de las grandes desventajas de estar lejos del Perú (hace cinco años que no voy) es que no se entera uno de las muchas y muy interesantes actividades que la comunidad académica lleva a cabo en el país (esas son las noticias que no aparecen en Google News). Mi buen amigo Jorge Iván Pérez Silva, ilustre lingüista peruano y profesor de la Universidad Católica, me informa de la existencia de este documental (en cuya elaboración él ha participado activamente) sobre la diversidad del castellano en el Perú. Producido por la asociación PROEDUCA-GTZ, este video es uno de los documentos gráficos más extraordinarios que conozco acerca de la variación dentro del español (ciertamente es único en el Perú)---y me cuenta Jorge que ya está en marcha un documental sobre las otras lenguas peruanas, que esperamos con entusiasmo.

Se trata de un esfuerzo notable, realizado por lingüistas peruanos, que despliega, con extremo profesionalismo y mucha enjundia, los rasgos que distinguen las diversas formas de hablar castellano en nuestro país. El documental incluye, de la mano de diversos especialistas, una reflexión sobre el carácter discriminatorio con el que algunos usan la noción de lengua estándar, y aboga por el reconocimiento pleno de la diferenciación lingüística (en la escuela, por ejemplo).

Los invito a disfrutarlo.



Labels: , ,


 

Los guaraníes piden ayuda

Como habíamos comentado algunas otras veces, Paraguay se encuentra en una curiosa circunstancia lingüística: la inmensa mayoría de la población (9 de cada 10) habla guaraní, pero el Estado funciona exclusivamente en español. Existe desde hace ya tiempo un movimiento para reivindicar el uso de aquella lengua en la escena oficial; aquí un ejemplo de esas actividades: una carta abierta al Presidente de la Comunidad Autónoma de Cataluña, pidiendo ayuda para la creación de los instrumentos que permitan su oficialización efectiva. Reproduzco la carta, que, además, nos proporciona algunos datos sobre la situación del guaraní hoy en Paraguay:

Guaraní, lengua oficial y de trabajo del Mercosur y lengua oficial plena de Paraguay

Al Presidente del Gobierno de Cataluña Muy Honorable Sr. José Montilla Aguilera Presidente del Gobierno de Cataluña

Muy Honorable Sr. Presidente:

Nos dirigimos a usted en su condición de Presidente del Gobierno de Cataluña. Nos dirigimos a usted y, a través de usted, al pueblo catalán, después de habernos dirigido a la Presidenta de Irlanda y al pueblo irlandés, y al Primer Ministro del Quebec y al pueblo quebequés, y antes de dirigirnos a otras comunidades humanas del mundo que viven y conviven con dos o más lenguas. Nos dirigimos a usted en nuestra condición de entidades y personas interesadas en la justicia social, la democracia, el desarrollo, los derechos humanos y los derechos lingüísticos en nuestra sociedad.

Estamos buscando cooperación y colaboración internacional para normalizar el guaraní, para salvar el guaraní, para salvar las lenguas americanas viables. América ha sido el continente que ha padecido la mayor y más brutal devastación lingüística derivada de los procesos de colonización. Tan bárbara ha sido esta devastación que ninguna lengua americana es hoy la lengua de normal funcionamiento de un Estado americano. Esto no pasa en ningún otro continente del mundo.

Nos dirigimos a usted y al pueblo catalán para recabar su ayuda técnica, política, social y económica en el proceso de normalización, normativización, estatalización e internacionalización en los entes supraestatales americanos, de la lengua guaraní, así como la protección y promoción de las demás lenguas americanas de Paraguay. Y todo ello sin renunciar al castellano, que forma parte de nuestro patrimonio cultural, como lo forma del suyo propio, pues sabemos, Sr. Presidente, que es su lengua primera y familiar, y la lengua primera de muchos catalanes con orígenes o raíces en regiones de lengua castellana, como es su caso. Y sin renunciar tampoco a otras lenguas: lenguas primeras, segundas, terceras de/para nuestros conciudadanos. Todos somos y seremos, en el mundo actual, en un grado u otro, multilingües en el presente y en el futuro.

¿Por qué nos dirigimos a usted y al pueblo de Cataluña? ¿Por qué nos interesa el catalán y la situación lingüística de Cataluña? La lengua catalana es, en palabras del lingüista estadounidense Joshua Fishman (Reversing Language Shift: Theory and Practice of Assistance to Threatened Languages. Clevedon, Multilingual Matters, 1991), uno de los tres casos “claros” de éxito en el proceso de revitalización lingüística.


Los otros dos casos de éxito, el hebreo moderno y el francés del Quebec (Canadá), poco se parecen al caso del guaraní. El hebreo moderno es o fue una lengua “necesaria” para construir un Estado moderno (Israel, 1948) en base a ciudadanos procedentes de todo el mundo y con muchas y variadas lenguas familiares; es una lengua con una fuerte e histórica significación religiosa y cultural; una lengua con una milenaria tradición escrita, y es una lengua que cuenta con una gran diáspora (que actúa como lobby) en todo el mundo que le presta apoyo y difusión. La situación del francés del Quebec también es muy diferente de la del guaraní: el francés nunca dejó de escribirse y de enseñarse en el Quebec y nunca fue perseguido. El francés contó y cuenta con el respaldo y el apoyo político, económico e intelectual internacional de Francia y la francofonía y es una lengua de uso internacional (Naciones Unidas, Consejo de Europa, Unión Europea, etc).


Por el contrario, el caso del catalán tiene semejanzas con el caso del guaraní: convive con el castellano, tiene una demografía de hablantes (en todo su territorio) similar (7-12 millones), es una lengua transfronteriza (el guaraní se habla en Paraguay, Argentina, Bolivia, Brasil y Uruguay, mientras que el catalán/valenciano es hablado en España, Francia, Andorra e Italia), ha sido perseguido y prohibido hasta casi su desaparición en algunos sitios, convive con miles de inmigrantes de otras lenguas (en el caso de Paraguay, el guaraní recibe hoy una muy enorme presión del portugués de Brasil, además de la presión de los minoritarios sectores monolingües de lengua castellana), y no tiene detrás ninguna diáspora o lobby ni ningún potente Estado extranjero que lo promueva o lo defienda.

Cierto es que también existen notables diferencias. Para empezar, el catalán es una lengua románica, lo que le permite tomar modelo de otras lenguas románicas (el mismo latín o el portugués, el castellano, el italiano, el francés, el occitano, etc.); el guaraní no puede tomar modelo de ninguna lengua de su familia para mativizarse o normalizarse simplemente porque ninguna lengua del tronco tupí-guaraní se ha normalizado. El catalán cuenta con una historia escrita de 1.000 años (por “sólo” unos 500 del guaraní).

El catalán cuenta con una muy potente producción editorial y literaria (da fe de ello que sea la literatura o lengua invitada de la Feria del Libro de Frankfurt 2007) y científica (ambas cosas sólo muy incipientes en guaraní) y que es la lengua de una sociedad con un aceptable Estado del Bienestar (muy débil, por no decir inexistente, en gran parte del área del guaraní), pero a pesar de ello puede aportar muchas cosas al guaraní. Así lo creemos. Así lo pensamos.

Sr. Presidente, el Observatorio Guaraní Europeo, uno de los firmantes de esta carta abierta, se constituyó, de forma nada accidental, en Cataluña (Barcelona), con ciudadanos/as europeos/as y ciudadanos/as del ámbito lingüístico del guaraní, especialmente paraguayos/as, para aprender de la experiencia de gestión lingüística en Cataluña, el área del catalán/valenciano, en España y en Europa y “transferirla”, adaptada y contextualizada, a la realidad americana. Cataluña es un referente mundial y un referente muy importante para nosotros y para otras comunidades lingüísticas de América y del mundo, de un proceso de revitalización/normalización lingüística.

Si Cataluña y el pueblo catalán no saben ver ni comprender el papel que están llamados a jugar en los procesos de revitalización/normalización de otras lenguas, ni ven ni entienden las ventajas para todo el mundo (hablantes de catalán y europeos, hablantes de guaraní y americanos) de contribuir de forma real, metódica, efectiva y constante, a la preservación de la diversidad lingüística y cultural americana y mundial, nosotros iremos a golpear a otras puertas hasta que alguien nos haga caso, nos escuche, nos apoye y nos ayude. Pronto tendremos en Paraguay una Ley de Lenguas que está en trámite: el contexto no puede ser más favorable para tejer lazos de cooperación y colaboración.

Sr. Presidente, en nuestro país, en nuestra área lingüística, en América, en el mundo, hemos callado durante demasiado tiempo. Hemos vivido durante demasiado tiempo en la más absoluta ignorancia sobre los derechos lingüísticos (y humanos) más elementales por culpa de unos gobernantes que jamás quisieron formar en sus derechos humanos y lingüísticos a la población. A la mayoría de la población. Unos gobernantes que implementaron, toleraron, crearon, por 200 años de vida nacional independiente, un bárbaro régimen de “apartheid lingüístico” construido sobre el castellano. Y por culpa de unas ONG y unos programas internacionales de cooperación al desarrollo que mientras consideraban prioritario defender, promover, usar, el francés, el sueco, el italiano, el danés, el castellano, el finés, el alemán, el catalán, el japonés, el noruego, etc. en sus países respectivos, jamás hicieron nada sistemático para defender, promover y usar nuestras lenguas en América. Jamás. Sr. Presidente, el 100 por 100 de los habitantes de Paraguay saben algo de guaraní.

El 90 por ciento habla guaraní como lengua primera o lengua segunda. El 60 por ciento de los hogares paraguayos son de lengua guaraní. El 30 por ciento de los/as paraguayos/as todavía hoy sólo habla guaraní y, a pesar de ello, el Estado paraguayo no funciona en guaraní. Un auténtico modelo de “apartheid lingüístico” que ha existido por doscientos años de vida nacional independiente (1811). Ya no vamos a callar más. No nos lo podemos permitir. Y no queremos hacerlo. Ya no.

Sr. Presidente, entendemos al pueblo catalán como uno de los mejores ejemplos actuales de sociedades con convivencia bilingüe/multilingüe. Vemos a Cataluña como una potencial y posible aliada para denunciar el “apartheid lingüístico” paraguayo contra el guaraní. Necesitamos aliados en la preservación de la identidad cultural y lingüística, la nuestra y la suya, porque en realidad lo que estamos haciendo es ayudarnos mutuamente. Lo que estamos ofreciendo es ayuda mutua. Nada más, Sr. Presidente que ayuda mutua para preservar la pluralidad lingüística y cultural humana.

(firmas)

Labels:


Sunday, September 02, 2007

 

Despreciar a la novela

Apenas termino de mudarme de New England al Midwest. Ya estoy como 10 días en Bloomington, un bellísimo pueblo en medio de Indiana. He estado desempacando y preparando mis clases---enseño lingüística hispánica en Indiana University. Han sido días bien trajinados, pero ya estoy volviendo a mi rutina. Regreso al blog ahora. Brevemente, porque todavían me quedan cosas por hacer.

No quería dejar pasar esta expresión , que encontré en el blog de Gustavo Faverón (la cursiva es del autor):

muchas veces he dicho, como podría decirlo cualquiera, que hay millones de novelas estúpidas y despatarradas en el mundo, pero nadie ha sido jamás tan miope como para acusarme por ello de despreciar a la novela.
Gustavo Faverón en Puente Aéreo. 31 de agosto del 2007

Se suele decir que los objetos directos llevan A solo cuando son animados y específicos; por ejemplo, Vio a Juan, pero no *Vio a la casa. Novela no es precisamente animado (de hecho, no es posible decir, por ejemplo, *Escribió a la novela). Alguno podría pensar que se trata de un cambio en marcha, pero hay que detenerse un poco en la expresión. El autor se refiere no a una novela en particular sino a la novela en general (esa es precisamente la razón por la que coloca entre cursivas el artículo la). Es decir, se usa una expresión para referirse a un objeto único, a saber, la clase de novelas. Si eso es correcto, lo que se está en verdad usando es un nombre propio. Es bien sabido que los nombres propios provocan la presencia de A, incluso si no son animados: Vio al Huáscar. Es más, es posible decir Despreció la novela; pero en este caso la interpretación de clase se diluye un poco---la expresión ahora parece más natural si se usa para referirse a una novela en particular.

Labels: ,


This page is powered by Blogger. Isn't yours?